La Pirámide de Mayo fue el primer monumento histórico con que contó Buenos Aires. La misma fue inaugurada en el año 1811 al conmemorarse el aniversario de la Revolución de Mayo. La obra creada por Francisco Cañete era un obelisco y no una pirámide. El significado de la misma cuenta con diversas opiniones con respecto a la estatua de la parte superior de la misma, algunos creen que con ella se representa la Republica, otros, por su parte la asocian con la Victoria y otros con la Libertad.