En el año 1935 se creo la famosa pizzería Las Cuartetas, ubicada en Corrientes 838. esta pizzería de destaco de las otras ya que brindaba la posibilidad de elegir gustos diferentes y salir de la clásica muzzarella, entre las innovaciones se podía elegir espinaca con salsa blanca, champiñones, jamón con morrones, gustos que hoy ya son considerados clásicos, pero en su momento fueron toda una novedad. El nombre del establecimiento se debe a que el escritor Alberto Vaccerezza escribía versos en las servilletas, cuartetas que eran obsequiadas a los clientes.
La pizza Salvatore contaba con un gusto muy característico, este provenía de la forma de hornearle, ya que los ingredientes se colocaban en el horno con la masa cruda.
El restaurante Borccolino (ubicado en Esmeralda 776) le debe su nombre a la forma en que los inmigrantes italianos denominaban al distrito de Brooklyn (Nueva York).
La heladería más antigua de la ciudad fue creada en 1902 y aun funciona en Corrientes 1181, conocida bajo el nombre de El Vesubio aun conserva los vitrales en los que se puede ver la ciudad de Nápoles y como fondo el famoso volcán.
El establecimiento que creado por los Cocitori, quien importo al país la primera maquina para elaborar helados. En el invierno se pu3eden disfrutar churros bañados en chocolate.
En Corrientes y Talcahuano se encuentra el café El estaño. Este lugar se hizo conocido ya que en el trabajo el petrolero Aristóteles Onassis cuando en su juventud vivía en Buenos Aires. Lo más curioso de todo, es que, según cuenta el mito, Onassis en más de una oportunidad le sirvió café a Carlos Gardel.
En Brasil y Defensa se encuentra el Café Británico que reabrió sus puertas en febrero del año 2007 luego de haber cerrado sus puertas en junio del 2006 por problemas contractuales. Originalmente este café fue inaugurado en 1928. El nombre del comercio se debe a varios ingleses veteranos de la Primer Guerra Mundial que lo usaban como punto de encuentro.
En el año 1982 cuando se llevaba acabo la guerra por la recuperación de las Islas Malvinas el café se llamo Café Tanico (quitándole el Bri), luego de unos años recupero su nombre original. La leyenda cuenta que en este bar Sabato escribió la archi conocida novela “Sobre héroes y tumbas”.
El Bandería, ubicado en Guardia Vieja 3601 empezó a juntar banderines en el año 1929. En sus paredes se pueden ver banderines de todos los clubes de fútbol del mundo. En la actualidad la cifra supera los 400.
El Bar Trianon fue el encargado de inventar el sándwich de palmita. Esto sucedió en la década de 1940. En aquella época la gente hacia cola para probar la novedad, hasta Juan Domingo Perón se vio tentado por el acontecimiento. En la actualidad el Café Margot ocupa este espacio (Boedo 857 esquina San Ignacio). El lugar fue declarado “bar notable” por el Gobierno de la Ciudad.
En el histórico café ubicado en Boedo 745 se reunían los hinchas de San Lorenzo luego de los partidos, cuando el equipo ganaba. Era muy pintoresco ver a la barra de hinchas ubicados entre los tangueros y los intelectuales de la época que solían frecuentar el lugar.
Estas solo son algunas historia de los cafés de Buenos Aires, pero sin lugar a duda en cada uno de los otros, de los no mencionado hay miles de anécdotas que merecen ser contadas y recordadas. Además de ofrecerte que nos dejes tus comentarios, te pedimos que nos cuentes alguna anécdota que sepas y por supuesto si un día estas paseando por la maravillosa Buenos Aires, no dejes de darte una vueltita por uno de ellos. Te sorprenderás.
Imagen antigua de Las Cuartetas
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