Estambul es la ciudad más importante de Turquía no sólo en el aspecto histórico, sino que también en el económico, pues concentra un 30% de la producción industrial y es el principal puerto del país. Cuenta con una extensa red de carreteras que la comunican con los centros urbanos más importantes de Europa.
El crecimiento económico y la modernidad no han impedido que esta hermosa ciudad conserve una rica arquitectura de origen fundamentalmente musulmán. Esta es famosa por sus cerámicas, por el uso de piedras en las murallas y por la presencia de audaces e ingeniosas cúpulas en las mezquitas. Estos atractivos históricos atraen a cientos de turistas que la visitan cada año.
Antiguamente conocida como Bizancio y como Constantinopla tiempo después, era el centro de comercio y comunicación cultural entre Asia y Europa. Han pasado ya veintiocho siglos de rica tradición histórica, política y económica y esta ciudad se ha convertido en una de los más importantes destinos turísticos del mundo, sólo comparable con Roma.
Fundada en el 660 a.C., por lo antiguos dorios, su situación estratégica y singular ubicación geográfica le facilitó un rápido desarrollo como centro comercial. El Imperio Romano la capturó en el 196 d.C., recuperando su antigua gloria recién en el 324 de la era cristiana, cuando Constantino I la transformó en capital del Imperio romano.
Para esta época se le conocía como la Nova Roma a Constantinopla y fue adornada con hermosas construcciones y obras de arte. Entre ellas se cuentan el Palacio Real, el edificio del Senado y la basílica de Santa Sofía que pueden verse hasta la actualidad, además de numerosas pinturas y esculturas que Constantino trajo desde Roma y Grecia para embellecer la capital.
Cuando la ciudad pasó bajo el dominio turco adquirió el nombre actual de Estambul. Sus nuevos dueños la convirtieron en la capital del Imperio otomano y embellecieron la ciudad aún más. En este periodo se construyeron hermosas y numerosas edificaciones, como la Mezquita Azul y el Palacio Topkapí-Sarayí, además de numerosos jardines y fuentes.
Las zonas históricas de la ciudad fueron declaradas en 1985 por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad, las razones son muchas, se pueden apreciar hermosas joyas arquitectónicas como la Iglesia de la Divina Sabiduría (Aya Sofía), Sar?yer, Eyüp y Taksim en el lado europeo, y Beyköz, Üsküdar, Kad?köy, Moda, Bostanc? y Adalar en el lado asiático. También podemos apreciar el fabuloso hipódromo bizantino, las mezquitas de Sultanahmet y Süleymaniye; el Palacio de Topkap? (Topkap? Saray?), sede del poder imperial otomano, y otros monumentos famosos.
Su amplio bagaje cultural y tradición histórica ha sido motivo que fuera declarada como la Capital Europea de la Cultura para el 2010, junto a Pecs en Hungría y Essen en Alemania.
Desde el año 1923 Turquía adoptó como capital a la ciudad de Ankara, sin embargo Estambul sigue siendo una ciudad que ostenta un poder económico, industrial y cultural importante, siendo uno de los destinos turísticos más codiciados del mundo. Alberga más de una docena de universidades y es la sede central del Patriarcado Ecuménico de Constantinopla, cabeza de la Iglesia Ortodoxa.
Créditos: imagen obtenida de Wikipedia, fotografía de Robert Raderschatt.