Cuenta con 367.000 habitantes y tiene una gran cantidad de atractivos que hacen que esta provincia sea visitada por miles de turistas de todo el mundo durante todo el año.
El nombre proviene de la palabra aymará sagta que significa muy hermoso y es una de las provincias más importantes del norte argentino. Desde una imponente vista al ingresar por la entrada principal, se puede apreciar un valle con mucha vegetación con un predominio de arbustos y con el agregado de ser un importante centro urbano. Además, cuenta con diversos puntos turísticos que hacen de esto un lugar con los paisajes mas variados, desde valles y bolsones hasta quebradas.
Una de las recomendaciones una vez que se llega a la ciudad es subir al cerro San Bernardo por medio del teleférico, situado en avenida San Martín e Hipólito Yrigoyen. Por doces pesos argentinos (viaje de ida y vuelta) y con una duración de ocho minutos se puede llegar a la cumbre para disfrutar de la vista de la ciudad. Luego se puede descender a pie por un recorrido ecológico.
Luego se puede visitar el casco histórico. Ubicada en la plaza central se encuentra el Cabildo, muy similar al de Buenos Aires. Su construcción data del siglo XVII y en la actualidad cuenta con un museo arqueológico donde se pueden apreciar vasijas, herramientas y armas indígenas y también de los primeros colonizadores.
También durante el recorrido de la ciudad no hay que dejar de visitar la Catedral, el Palacio Arzobispal y la iglesia de San Francisco, construida en el siglo XVI y que aún hace sonar la campana de la patria fundida con el bronce de cañones de batalla. Otros edificios para visitar son: el templo de la Viña, las casas de Ariel Rancel y de Leguizamon y el mercado artesanal ubicado en el parque San Martín, donde se puede disfrutar de comidas caseras (tamales, humitas) y se pueden comprar artesanías a precios muy bajos.
Otra de los sitios que se pueden visitar es el museo de Arqueología de Alta Montaña (MAAM) que nació para resguardar y difundir el hallazgo de los niños del Llullaillaco, tres chicos incas que se descubrieron congelados en marzo de 1999 en la cima del volcán Llullaillaco por arqueólogos expertos a una altura de 6700 metros.
Para aquellos que disfrutan de la noche es recomendable pasear por la peatonal La Florida y por la plaza principal ya que cuenta con varios restaurants en los cuales se puede disfrutar de muy buena comida. Pero si se quiere divertir aún mas durante todos los días de la semana hay que ir directamente a la calle Balcarce. Son aproximadamente 5 cuadras de boliches, pubs, peñas, bares y se pueden disfrutar de shows de folclore y rock.