Si quieres saber como se sentiría vivir en una ciudad en donde no existan los celulares, los bocinazos y los megáfonos tienes que ir a La Gomera, donde el silencio es realmente asombroso.
La Gomera se encuentra a unos cuantos kilómetros de la Costa Noroeste de África, en una parte de las Islas Canarias (España). Al lugar puedes arribar por unos pequeños aviones que van de isla en isla o por su puerto, el de San Sebastián, un pequeño lugar muy pintoresco.
Una curiosidad de la zona: La Gomera cuenta con un idioma propio, en el que no se emplean las palabras sino el silbido. El mismo tiene la capacidad de escucharse a cuatro kilómetros a la redonda, no sólo por los fuertes pulmones del que lo realiza sino porque la acústica del lugar pareciera permitirlo.
De San Sebastián sale un camino que atraviesa los campos sembrados hasta llegar a la Playas Santiago. En ella se pueden ver cangrejos negros y muy rápidos que caminan sobre las piedras, también de color negro . Y si miras para el cielo verás como las gaviotas juegan libres en el cielo, correteándose unas a otras. Si bien es cierto que La Gomera no se encuentra en el fin del mundo, está cerca de ello. Si uno tiene la posibilidad de ver un mapa creado en la Antigüedad, La Gomera era el último punto a la orilla de los mapas.
Cuando la industria marítima se encontraba en su apogeo las embarcaciones que pasaban por las Canarias como último punto tomaban a este lugar para abastecerse de víveres. En la actualidad las siete Islas Canarias son parte de España y a pesar de eso no tienen nada que ver con las características de la España Continental (salvo por el idioma). Cuando uno piensa en las Islas Canarias, no se por que motivo, imagina a los simpáticos pajarillos que llevan este nombre, pero el nombre de las islas proviene del latín canis: perro.
La isla La Gomera es casi un círculo y su diámetro tan sólo alcanza los 25 kilómetros. La geografía de la isla es muy accidentada, con lo cual podemos llegar a pensar que el idioma del silbido tiene un origen sumamente útil, evitar subir y bajar para contarle las novedades a tu vecino. Cuenta la leyenda que cuando la nave de Colon atracó en puerto, los avisos silbados viajaron tan velozmente que en cuestión de minutos todos sabían lo que estaba pasando.
Es silbido es un tipo de idioma que funciona por sustitución, sólo cuenta con 6 notas y cada una de éstas señala una serie de vocales o consonantes; cada silbido es una simple aproximación fonética de la palabra misma. Por temor a que este idioma se extinguiera, desde el año 1999 es obligatorio enseñarlo en las escuelas de la zona.
Podemos observar aquí La Roca Agando que causa impresión por sus 1202 metros de altura, y tiene el aspecto de ser un dedo pulgar que apunta al cielo. Cuando una baja de ella el camino serpentea y el océano parece de forma repentina al acercarse al Valle Gran Rey que, según dicen los que saben, es la playa más linda de la zona.
Otro lugar para visitar en la isla es el Parque Nacional de Garajonay. Se cree que hace 500 años éste era la capital del silbido. Si estás en este parque encontrarás seguramente lo que viniste a buscar, un silencio que inquieta. El mismo sólo se interrumpe por algún animalito o por el ruido que hacen las hojas al ser movidas por el viento, pero nada más que eso rompe ese escalofriante y profundo silencio.
Para más datos de la zona podes entrar a la página de las Islas Canarias , Isla La Gomera
1 comentario en «Aprender a escuchar es un proceso lento pero en La Gomera vale la pena intentarlo»