Canberra significa, en lengua nativa, “lugar de encuentro”. Este nombre refleja con exactitud la posición estratégica de la capital australiana, edificada entre las dos ciudades más pobladas de la isla, Sydney y Melbourne (a 300 kilómetros al sudoeste de Sydney y 650 kilómetros al noreste de Melbourne). Es la primera ciudad Australiana construida desde cero y planificada en todos los aspectos, un modelo moderno de urbe, donde conviven la modernidad con el arte y la cultura.
Se sabe que en 1820 llegaron a Canberra los primeros colonizadores ingleses. 21 años después y tras hacer una improvisada distribución de terrenos, fundaron Queanheyán, a 12 km del actual asentamiento de la ciudad.
Ya iniciado el siglo XX, el gobierno australiano convocó a un concurso internacional destinado a establecer un plan de desarrollo urbanístico para la ciudad. La propuesta fue adjudicada al arquitecto norteamericano Walter Burley, quien realizó el diseño y la construcción de los edificios destinados a las instituciones gubernamentales, que hasta ese momento funcionaban interinamente en Melbourne.
En 1927 el Parlamento y otras dependencias de gobierno se trasladaron hasta Canberra. En 1958 se le confirió en forma oficial el rango de capital de la nación, bajo las iniciales T.C.A. (Territorio de la Capital Australiana).
La ciudad está situada en el sudeste de la isla. Sus alrededores se caracterizan por tener numerosas reservas naturales como el Tidbinbilla, el Parque Nacional Namadgi y el Jardín Nacional Botánico, en las cercanías de la montaña Negra de Canberra.
La belleza del paisaje natural, acompañado de una moderna infraestructura, ha permitido un fuerte desarrollo del turismo. La capital australiana recibe cada año a más de un millón de visitantes atraídos por lugares como la Casa del Parlamento, la Galería Nacional, la Torre de las Telecomunicaciones y el Museo Tecnológico, entre otros.
En cuanto a la arquitectura destaca el Australian War Memorial, al cual se llega mediante el ANZAC Parade, una amplia calle, donde se realizan los desfiles militares. Este lugar es un homenaje a las valientes fuerzas militares australianas que han combatido y muerto en las guerras del pasado siglo.
La National Gallery of Australia, es otro de los atractivos, sobre todo para los amantes del arte y con un gran archivo relacionado a la cultura aborigen australiana, aquí se guarda una amplia colección de documentos y material histórico de dicha cultura. Entre su oferta artística internacional destacan obras de Pollock y Rubens.
La Vieja Casa del Parlamento es uno de los lugares más visitados, al igual que la National Library of Australia, la National Archives of Australia y el National Museum of Australia. La hermosa y modernista Biblioteca Nacional cuenta con 220 kilómetros de estanterías, suficientes para satisfacer al lector más ávido.
Como siempre, Australia destaca por su pasión por la música y el arte, de esto Canberra no escapa, muestra de ello es el Canberra Theatre and Playhouse, el cual alberga a los festivales de música, conciertos y demás producciones relacionadas. También existen otros edificios relacionados con esta manifestación humana: el Llewellyn Hall (situado dentro del ANU School of Music), el Street Theatre, situado en Childers Street, y que presenta muestras de compañías de teatro profesionales y amateur y el Albert Hall, inaugurado en 1928.
1 comentario en «Canberra, un lugar de encuentro en Australia»